Elon Musk, con una fortuna calculada en 273.000 millones de dólares, no se contenta con estar al tope del ránking de los más multimillonarios del Planeta. Ahora quiere quedarse con el 100% de Twitter, pese a que hace poco tiempo había criticado a la red social por su "falta de Libertad de Expresión". El dueño de Tesla, Space X y PayPal va por todo. Y nada lo frena.
Por Gabriel Michi
"Hice una oferta". Así de escueto. Y contundente. Digno de su personalidad. Y su ambición. Elon Musk, el hombre más rico del Mundo (con una fortuna estimada en 273.000 millones de dólares), anunció que se quiere quedar con el 100% de Twitter. Nada más y nada menos. Hace pocas semanas compró el 9% de la compañía, por un valor de 2.800 millones de dólares, convirtiéndose en el accionista mayoritario. Y ahora ofrece 43.400 millones (el equivalente a la deuda que Argentina mantiene con el Fondo Monetario Internacional) para obtener la totalidad de la empresa. Pero su estrategia no acaba allí. También pretende que la red social deje de cotizar en la Bolsa y sea un emprendimiento personal únicamente de su propiedad.
Es llamativo el movimiento de ajedrez que Musk está realizando ya que hasta hace poco tiempo era un ferviente crítico de Twitter. Y acusaba de atentar contra la Libertad de Expresión. De hecho, ahora con esta iniciativa de quedarse con todo el paquete accionario no retrocede en su mirada. "Invertí en Twitter porque creo en su potencial para ser la plataforma para la Libertad de Expresión en todo el mundo, y creo que la Libertad de Expresión es un imperativo social para una democracia que funcione". Así lo expresó en una carta que le envió al presidente de la Junta de Administración de Twitter, Bret Taylor. Y agregó: "Sin embargo, desde que hice mi inversión, ahora me doy cuenta de que la empresa no prosperará ni cumplirá con este imperativo social en su forma actual. Twitter debe transformarse en una empresa privada". Con eso preanunciaba su intención de que una vez adquirida sacará a la compañía de la Bolsa de Estados Unidos. Y fue más allá: "Twitter tiene un potencial extraordinario. Lo desbloquearé".
La oferta es tal que supera todas las expectativas y valores del mercado. Musk propone pagar 54,20 dólares por acción, un 38% más de su valor al 1 de abril. A partir de que se conoció la noticia, las acciones de la empresa del pajarito se dispararon. Ahora la pelota queda del lado del Directorio que ya miraba con recelo el desembarco de Elon cuando se quedó con el 9%. Algo que se vio reflejado en que el primero en responder en forma individual fue el príncipe saudita Al Waleed bin Talal Al Saud, uno de los mayores accionistas de Twitter (posee alrededor del 2,5%), rechazó la oferta de Elon Musk.
Sin embargo, la empresa Twitter emitió un comunicado confirmando que había recibido la oferta y que revisaría cuidadosamente la propuesta "para determinar el curso de acción que cree que es lo mejor para la compañía y todos los accionistas de Twitter".
La última jugada del dueño de Tesla, PayPal y Space X, estuvo muy bien pensada de antemano. De hecho pasaron unos días apenas desde que el propio Musk rechazó integrarse al Consejo de Administración de la compañía, algo que sorprendió a todos. Ahora se supo que la condición para que se sume a la Junta directiva era que no pudiera comprar más del 14,9% de las acciones. Ahora podrá quedarse con toda la empresa y hacer con ella lo que quiera. Si es que en Twitter aceptan su propuesta. Que, fiel a su estilo, fue -según sus palabras- la "mejor y última oferta".
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