En el ensayo que realizaron con decenas de empresas y cientos de trabajadores, el rendimiento fue tan bueno que la mayoría de las empresas decidió mantener ese régimen.
Por Gabriel Michi
Vivir para trabajar o trabajar para vivir. Esa es la cuestión. Un dilema que se potenció con la pandemia de COVID 19, porque se tuvo más presente la finitud de la vida, por un lado, y porque se mostró que había alternativas no menos productivas de llevar adelante los trabajos sin necesidad de que fuesen presenciales. O, al menos, buscando fórmulas mixtas en donde se combinaban lo presencial con el "home office". Pero, más allá de esa tendencia que parece -más temprano que tarde- de nueva modalidad laboral, también crecieron distintas opciones que podrían ayudar a crear un vínculo distinto entre el trabajo y la vida personal de las personas, dejando más tiempo para el ocio. En ese contexto, en el Reino Unido muchas empresas hicieron un experimento para probar la semana laboral de cuatro días -en lugar de cinco- y el resultado fue tan bueno que gran parte de ella decidieron quedarse con esa práctica. Al cumplirse un año del mayor ensayo mundial en ese sentido, el éxito fue evidente.
Entre junio y diciembre de 2022, los trabajadores de al menos 61 empresas radicadas en el Reino Unido dedicaron a sus labores el 80% de sus horas habituales, recibiendo el mismo salario. El compromiso que asumieron -y que respetaron sobremanera- fue que debían cumplir con el 100% de su trabajo pactado. Después de esos seis meses, el resultado fue tan bueno que el 89% de esas compañías decidió mantener esa política y más de la mitad (51%) tomaron la decisión de que esa modalidad sea permanente.
El ensayo de 2022 estuvo organizado por la organización sin fines de lucro "4 Day Week Global" y la campaña "4 Day Week UK" en colaboración con investigadores de las universidades de Cambridge y Oxford, y el Boston College. Y los datos del estudio ahora publicado por Autonomy señalan que "los efectos de las horas de trabajo reducidas han sido abrumadoramente beneficiosos para el personal y sus empresas". Es más, cuando culminó esa prueba los empleados informaron disfrutar de una "mejor salud física y mental, un mayor equilibrio entre el trabajo y la vida personal, y una satisfacción general con la vida y menos agotamiento laboral" . Estas mejoras se han mantenido un año después. Y son compartidas también por los directivos de las compañías que expresaron que la semana laboral de cuatro días había tenido un impacto positivo en sus empresas.
Según Juliet Schor, profesora de Sociología en el Boston College, quien se encargó de entrevistar a los que participaron del experimento: "El punto clave es que los hallazgos sólidos a los seis meses no se deben a novedad o impactos a corto plazo. Estos efectos son reales y duraderos". Un par de datos concretos que ilustran el éxito de la propuesta fue que la rotación de personal disminuyó en la mitad en esos lugares. Además, uno de cada tres encuestados explicó que se había mejorado considerablemente la contratación y el 82% informó efectos beneficiosos en el bienestar del personal.
En el ensayo hubo que modificar algunas pautas en el funcionamiento diario de las empresas como, por ejemplo, la modalidad y frecuencia de las reuniones, como la dinámica de las comunicaciones laborales y qué tipo de prioridades se establecen. En el experimento participaron compañías de diferentes rubros como el marketing, la publicidad, los servicios profesionales, las ONGs, industrias construcción, manufactura, venta al por menor, atención médica y artes y entretenimiento.
"En este estudio ha quedado claro que la semana laboral de cuatro días no es solo una moda pasajera: las empresas de todo el Reino Unido han logrado 'hacer que funcione'", escribieron los autores del estudio. Y los beneficios son notorios no sólo en materia de productividad sino en la calidad de vida de los empleados que ahorraron tiempo, dinero y debieron viajar menos. Si bien, a partir de la pandemia hubo varios países donde se hicieron pruebas similares donde se acortó la semana laboral a cuatri días -como en Estados Unidos e Irlanda- la más extensiva y profunda fue la del Reino Unido. Y fue un éxito que llegó para quedarse.
Comments