En una audiencia en la Cámara de Representantes, tres ex oficiales testificaron sobre encuentros con naves "no identificadas". Uno de ellos habló de que encontraron restos biológicos no humanos. Qué elementos oficiales hay sobre la posible presencia alienígena.
Por Gabriel Michi
Es el misterio más grande del Mundo moderno. Ese que, ante la falta de respuestas, genera las fantasías más grandes. Y que da paso a las teorías más conspiranoides. Además de haber alimentado como pocos a la industria del cine. La idea de que el gobierno de Estados Unidos cuenta con información e incluso con pruebas materiales de la presunta aparición en la Tierra de tecnología y hasta seres extraterrestres le ha quitado el sueño a más de uno, aunque en muchos casos se veía a los más activos militantes de esas hipótesis como fanáticos "borders", con problemas psiquiátricos o sociópatas. Ahora, por primera vez en la Historia, especialistas en la materia y con autoridad en el tema llevaron ese debate al propio Congreso de los EE.UU. y sostuvieron que hay cosas que se ocultaron y que podrían ir en ese sentido. Y que los OVNIS pueden ser una realidad mucho más tangible.
En los últimos tiempos la mayor apertura de documentos desclasificados de la historia de EE.UU. llevó a que un subcomité del Congreso escuchara de boca de un ex oficial de Inteligencia que el Gobierno tiene información de una nave derribada en la que encontraron "restos biológicos no humanos". Fue el miércoles 26 de julio en el contexto de una audiencia donde testificaron tres militares retirados ante miembros de la Cámara de Representantes estadounidense. La convocatoria giraba en torno a "Fenómenos Anómalos No Identificados" –conocidos como FANI y más comúnmente llamados OVNIS– y las palabras de los especialistas sorprendieron a todos. De hecho advirtieron que los avistamientos pueden llegar a constituir hasta una cuestión de "seguridad nacional". Y, en ese sentido, reconocieron que el Gobierno decidió sostener un secretismo excesivo frente a un escenario difícil de dimensionar. La Subcomisión de Supervisión de la Cámara Baja que está indagando sobre el tema de los OVNIS le exigió a las autoridades gubernamentales que sean más transparente en la comunicación de estos fenómenos anómalos no identificados.
Ryan Graves, un expiloto de la Marina que ahora dirige Americans for Safe Aerospace, un grupo que fundó para animar a los pilotos a informar sobre incidentes de FANI, y David Fravor, un comandante retirado de la Marina estadounidense, fueron contundentes en sus testimonios en el Capitolio. Ambos hablaron de sus propios avistamientos de OVNIS mientras formaban parte de las fuerzas militares. En tanto, David Grusch, ex oficial de inteligencia de las Fuerza Aérea, denunció que el gGobierno estadounidense encubrió sus investigaciones sobre los avistamientos de objetos no identificados y dijo que comunicó la información al inspector general de la comunidad de Inteligencia. Fue el propio Grusch el que confirmó la existencia de "restos biológicos no humanos" en una nave derribada por la Marina.
Las palabras de Grusch fueron contundentes: “La tecnología a la que nos enfrentamos fue muy superior a cualquier cosa que tuviéramos”. Se refería a un avistamiento que él mismo protagonizó en 2004. Y señaló: "Ahora mismo necesitamos un sistema en el que los pilotos puedan informar sin miedo a perder su trabajo. Existe el temor de que el estigma relacionado con este tema provoque repercusiones profesionales, ya sea a través de la dirección o de su revisión física anual".
Si bien en esta oportunidad no se escucharon las explicaciones de ningún funcionario actual del Gobierno, en abril pasado Sean Kirkpatrick, director de la Oficina de Resolución de Anomalías del Pentágono, creada por el Congreso para centrarse en los FANI, confirmó -ante una subcomisión del Senado- que las autoridades investigan 650 casos potenciales de fenómenos aéreos no identificados. Incluso mostró dos videos -uno que aún no pudo resolverse- que dejaron boquiabiertos a los propios legisladores. Sin embargo, Kirkpatrick remarcó que no había indicios de vida extraterrestre y que su oficina no había encontrado "ninguna prueba creíble" de objetos que desafíen las leyes conocidas de la física.
Pero no fueron las únicas imágenes o testimonios que volvieron a traer a escena el debate por los OVNIS. En mayo de 2021, el aficionado Jeremy Corbell publicó un video filtrado que había sido tomado por un barco de la Marina en el que se observa un objeto no identificado volar sobre el agua y desaparecer como si nada.. El episodio ocurrió frente a las costas de San Diego.
En abril de 2021, el propio Pentágono ya había confirmado la autenticidad de una serie de fotos y videos que fueron tomados por personal militar en 2019. En ellas se veían objetos con forma de triángulo que parpadeaban y se movían entre las nubes. También había imágenes de otros elementos volando en el cielo, con forma de esfera, bellota y dirigible metálico. No era algo nuevo. Un año antes el mismo Pentágono .publicó tres videos cortos de cámaras infrarrojas que parecían mostrar objetos voladores moviéndose rápidamente. En dos de los videos, aparecen miembros del servicio reaccionando con asombro ante la rapidez con la que se mueven los objetos. Un mes después aclararon: "Después de una revisión exhaustiva, el Departamento de Defensa determinó que la publicación autorizada de estos videos no clasificados no revela ninguna capacidad o sistema sensible y no incide en ninguna investigación posterior sobre incursiones en el espacio aéreo militar por parte de fenómenos aéreos no identificados".
La Academia de Artes y Ciencias "To The Stars", una compañía cofundada por Tom DeLonge, ex miembro de la banda Blink-182 que investiga la información sobre "fenómenos aéreos no identificados", había publicado esos videos de la Marina en 2017 y 2018. Esas imágenes fueron tomadas en 2004 y muestran un objeto que volaba de manera inexplicable. "Cuando me acerqué a él, aceleró rápidamente hacia el sur, y desapareció en menos de dos segundos", comentó el piloto retirado David Fravor.
Un informe, publicado por la Inteligencia de EE.UU. en 2021, indagó sobre 144 reportes calificados por el gobierno como "Fenómeno Aéreo No Identificado" (UAP, por sus siglas en inglés), y sólo le pudieron encontrar una explicación a uno de ellos. Si bien no aseguran que se trate de algo relacionado con la vida extraterrestre, tampoco lo descartan. "De los 144 informes que estamos tratando aquí, no tenemos indicios claros de que haya una explicación no terrestre para ellos, pero iremos donde los datos nos lleven", dijeron quienes estuvieron detrás del informe. Los investigadores también estaban convencidos de que la mayoría de los avistamientos eran "objetos físicos". "Creemos absolutamente que lo que estamos registrando no son simples artefactos de sensores. Son cosas que existen físicamente", dijo un funcionario bajo reserva de identidad, señalando que 80 de los incidentes reportados incluían datos de múltiples sensores. Es más, en por lo menos 11 casos, los pilotos declararon haber estado a punto de colisionar con estos extraños objetos.
Como el tema es considerado algo que podría afectar la seguridad nacional, en 2020, el Pentágono creó un grupo de trabajo para analizar "la naturaleza y los orígenes" de los fenómenos aéreos no identificados. "El Departamento de Defensa y los departamentos militares toman muy en serio cualquier incursión de aeronaves no autorizadas en nuestros campos de entrenamiento o espacio aéreo designado y examinan cada informe. Esto incluye examinar incursiones que inicialmente se informan como fenómenos aéreos no identificados cuando el observador no puede identificar inmediatamente lo que está viendo", señalaron las autoridades en un comunicado, aunque no dieron más detalles sobre la posibilidad de que se trate de algo extraplanetario.
"Decidí como jefe de la NASA, que, como había tantas sospechas sobre aliens, designaría a un comité integrado por científicos muy distinguidos, que ya está debatiendo. Y harán público su informe el próximo mes", dijo Bill Nelson, el titular de la agencia espacial de EE.UU. en su reciente visita a la Argentina. "Esperen al mes que viene y tendrán una respuesta", concluyó ante la pregunta de los periodistas que lo interrogaban frente a esta últimas novedades.
La idea de que el gobierno de EE.UU. mantiene bajo siete llaves los secretos sobre la posibilidad de presencia alienígena en la Tierra ha despertado todo tipo de teorías sobre, por ejemplo, qué hay en la famosa "Área 51" (en el desierto de Nevada), una base militar en la que muchos sospechan que incluso se mantienen restos de naves y seres extraterrestres. Pero más allá de todas las fantasías que esto genera, lo que sí queda claro es que, por algún motivo, las autoridades han mantenido el misterio en toda esta cuestión. Y que, de a poco, va aflorando información que por lo menos plantean dudas y más interrogantes. Incertidumbres que hoy dejaron de ser meras especulaciones de sectores conspiranoides para ocupar un escenario institucional muy importante como es el Capitolio de los EE.UU. Ese lugar de poder donde un día finalmente "aterrizaron" los OVNIS.
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