'Sister Hong': El escandaloso caso del chino que disfrazado de mujer sedujo a 237 hombres para lucrar con sus imágenes

La historia de Jiao (38) conmociona al gigante asiático. Se camuflaba de chica, deformaba su voz y utilizaba filtros en los videos. Después grababa a escondidas los encuentros sexuales sin el consentimiento de sus víctimas masculinas. Lo subía a redes y cobraba a suscriptores.

Por Gabriel Michi

Esta es la historia de un engaño derivado en una extorsión. Una mega estafa hasta con su propio nombre: 'Sister Hong' (o 'Hermana Roja'). Se trata del caso de un impostor chino que , tras hacerse pasar por una mujer en redes y seducir a 237 hombres, grabó los encuentros sin consentimiento y comenzó a vender los vídeos en plataformas online. Es un caso que conmociona a China y tiene como protagonista a Jiao, un hombre de 38 años que se hizo pasar por una mujer en Internet, engañando a cientos de víctimas y quien fue detenido por la Policía de Nanjing, en el este del país asiático.

El estafador grabó sin consentimiento a esos 237 hombres durante encuentros sexuales y luego difundió las imágenes en redes sociales como WeChat, QQ, Momo, Telegram, Reddit, Douyin y X. El hecho fue denunciado públicamente por un influencer de fitness que, tras ver sus propias imágenes publicadas online, llamó a la Policía. "Mi vida es un desastre y estoy listo para irme de Nanjing y mudarme a otra ciudad", dijo a sus seguidores.

Para seducir y engañar a sus víctimas, Jiao se vestía de mujer con una peluca y maquillaje. Pero no sólo eso: en sus vídeos, usaba modificadores de voz y activaba filtros de belleza. Según las autoridades policiales y judiciales, el motivo al principio no era económico, pero cuando Jiao descubrió que los hombres estaban dispuestos a enviarle ofrendas, empezó a cobrar por los encuentros.

El detenido invitaba a sus víctimas a su habitación para tener relaciones sexuales con él, unos encuentros que Jiao grababa a escondidas. Después, subía el contenido a un grupo privado que él mismo administraba, destinado a quienes pagaban por ver las imágenes. Según medios chinos, el precio de la membresía del grupo rondaba los 150 yuanes (unos 18 euros). Algo que está penado desde 2021 en China, según establece la Ley de Protección de la Información Personal.

Aún se desconoce si Jiao obligó a algunas de sus víctimas a tener sexo con él, lo que podría ser un agravante muy complicado para el estafador. Según los medios de ese país, muchos de los encuentros se realizaron sin protección, lo que ha generado preocupación por posibles contagios de enfermedades de transmisión sexual, incluido el VIH. Sin embargo, por el momento, las autoridades no han confirmado la existencia de casos de ETS vinculados directamente a este caso. Pero el fantasma está creciendo. Como el escándalo por los alcances del caso "Sister Hong".